Los churros caseros, crujientes por fuera y suaves por dentro, son un antojito que se disfruta en todo el Perú, desde puestos callejeros hasta la cocina de casa. Con una masa sencilla y buen aceite vegetal, salen perfectos. Puedes terminarlos con azúcar y canela, o rellenarlos con manjar blanco.
Ingredientes
- 250 g de harina sin preparar
- 250 ml de agua
- 20 g de mantequilla sin sal
- 1 cda (12 g) de azúcar blanca
- 1/2 cdta (2 g) de sal
- 750 ml de aceite vegetal para freír
- 100 g (1/2 taza) de azúcar para rebozar
- 1 cdta de canela en polvo
- 200 g de manjar blanco (opcional, para rellenar)
Utensilios
- Olla honda o sartén profunda
- Manga pastelera resistente con boquilla rizada grande
- Tijeras de cocina
- Espumadera
- Termómetro de cocina (opcional)
- Plato con papel toalla
Preparación
- En una olla, calienta 250 ml de agua con 20 g de mantequilla, 1 cda de azúcar y 1/2 cdta de sal. Cuando rompa hervor, apaga el fuego.
- Agrega de golpe 250 g de harina sin preparar y mezcla enérgicamente con cuchara de madera hasta formar una masa homogénea y sin grumos.
- Lleva la olla a fuego bajo 1–2 minutos, removiendo, solo para “secar” la masa. Retira y deja entibiar 5 minutos.
- Pasa la masa a una manga pastelera con boquilla rizada grande. Deja reposar 10 minutos para que tome cuerpo.
- Calienta 750 ml de aceite vegetal a 175–180°C (fuego medio). Si no tienes termómetro, prueba con un trocito de masa: debe burbujear y dorar sin quemarse rápido.
- Forma bastones de 12–15 cm directamente sobre el aceite, presionando la manga y cortando con tijeras. Fríe en tandas, sin amontonar.
- Cocina 2–3 minutos por lado, hasta dorado parejo y crujiente. Mueve suavemente para una fritura uniforme.
- Retira con espumadera y escurre en papel toalla. Mezcla 100 g de azúcar con 1 cdta de canela y reboza los churros aún calientes.
- Para rellenar (opcional): con una boquilla fina, haz un orificio en cada extremo e inyecta 15–20 g de manjar blanco por churro.
- Sirve de inmediato, todavía tibios, para disfrutar su mejor textura.
Tips para mejorar la receta
- Mantén la temperatura del aceite entre 175–180°C para lograr crocancia sin exceso de grasa.
- La masa debe quedar firme, no pegajosa; si está blanda, añade 10–20 g más de harina.
- Usa boquilla rizada grande: los surcos ayudan a dorar parejo y retener el azúcar.
- Fríe en tandas pequeñas para no bajar la temperatura del aceite.
- No añadas huevos en esta versión tradicional; el interior queda suave con agua y harina.
Cómo servir y acompañar
Se sirven calientes, espolvoreados con azúcar y canela, o rellenos con manjar blanco al gusto. En Perú van muy bien con chocolate de taza espeso, café pasado o emoliente caliente. Son un antojo perfecto para la tarde, compartidos en familia o con amigos.
Origen y tradición
Los churros llegaron con influencia hispana y se afianzaron en el Perú en panaderías y carretillas, especialmente en Lima y ciudades costeras. La versión rellena con manjar blanco es muy apreciada. Se consumen en ferias barriales, paseos dominicales y en temporadas frías, junto a chocolate caliente.
Con ingredientes sencillos y buena técnica, estos churros caseros quedan doraditos y ligeros, listos para azúcar y canela, o un toque de manjar blanco. Anímate a prepararlos en casa y disfruta ese aroma que invita a compartir, perfecto para una tarde peruana bien sabrosa.
Datos de la receta
Cocina: | Peruana |
Categoría: | Postres y Dulces |
Dificultad: | Media |
Rinde: | 6 raciones |
Calorías por ración: | 432 kcal |
Tiempo de preparación: | 20min |
Tiempo total: | 20min |
Enviar comentario